"No todos nuestros deseos pueden hallar satisfacción al instante. Hay que aprender a esperar pacientemente para que nuestros sueños se hagan realidad. (...) La fe es lo primero que hay que empaquetar dentro de un baúl para el ajuar"
SARAH BAN BREATHNACH
Según explica Sarah en "El encanto de la vida simple", el baúl del ajuar era la
donación que tradicionalmente preparaban las madres a sus hijas para que éstas llevaran consigo cuando se
casaban. Dentro de estos baúles acumulaban sábanas, colchas, manteles,
vajillas de porcelana, junto con sus más caros sueños y esperanzas para el futuro...
Confieso que esta es una de mis lecturas favoritas en todo el libro, ya que despertó al instante a la dama victoriana que vive en mí -¿la que fui quizá en otra vida?-, y revivió escenas...
